Tiempo Argentino
25 de abril de 2011
Por Mariano Beristain
Apoyará el plan económico productivo pero tratará de “influir” en la política oficial “sin confrontar”. En lugar de “demonizar” a la figura del dirigente camionero Hugo Moyano buscará avanzar en un consenso duradero con la Central Obrera
El vasco José Ignacio De Mendiguren asumirá mañana a las 17:30 horas la conducción de la Unión Industrial Argentina (UIA) con el doble objetivo de “influir” en la política económica oficial “sin confrontar” con el gobierno nacional y de lograr un mayor acercamiento con la Confederación General del Trabajo que dirige Hugo Moyano. Así lo explicaron ayer fuentes muy cercanas a De Mendiguren, quienes adelantaron que la nueva conducción fabril se diferenciará de la política hostil que mantiene la cúpula de la Asociación Empresaria Argentina (AEA), cuyas cabezas visibles son Héctor Magnetto (Grupo Clarín) y Paolo Rocca (Organización Techint). Una muestra de ello es que, a diferencia de su antecesor Héctor Méndez, quien ayer salió a defender con los ojos vendados la posición de Techint en la pelea por la participación accionaria del Estado en las empresas, De Mendiguren no tendrá una actitud militante y dejará que las instituciones definan este contrapunto. “El vasco cree que deben ser los legisladores los que corroboren el DNU 441 y que la justicia se tiene que expedir en la pelea judicial entre el Estado y Techint”, señaló la fuente. De esta manera, De Mendiguren busca reflejar la posición pública de muchos empresarios que no quieren quedar “pegados” en la pelea que Rocca y Magnetto mantienen con el Ejecutivo, usando como cabeza de playa a la AEA. De cualquier manera, mañana De Mendiguren, uno de los pocos empresarios con visión y proyecto político propio, ofrecerá un discurso con los ingredientes necesarios para conformar a los empresarios de todas las líneas internas de la entidad, sin que ello implique un desplante al gobierno. Un indicio de ello es que la UIA no invitó a la asunción a ningún representante del gobierno, pero tampoco a los dirigentes de la oposición.
El otro punto en el que De Mendiguren se va a diferenciar del ala dura de AEA y la UIA es en la relación que mantendrá con la Central Obrera. AEA, fundamentalmente a través de los distintos medios del Grupo Clarín, ha tratado de “demonizar” la figura del camionero Hugo Moyano y de los integrantes del Consejo Directivo de la CGT. De Mendiguren, en cambio, invitó a su asunción a todos los miembros de la plana mayor de la CGT porque cree que “no hay proyecto nacional sin trabajadores”. El industrial aspira a que existan dos niveles de diálogo; uno que apunte a zanjar las diferencias del día a día y otro de mayor aliento en el que se avance hacia una “estrategia de país” en el mediano y largo plazo.
“Aunque todavía no lo conversé con Moyano, creo que vamos a ir. Es un buen indicio de la nueva presidencia de la Unión Industrial porque muestra la intención de que el vínculo con los trabajadores se enriquezca”, explicó a Tiempo Argentino, Omar Plaini, diputado nacional y vocal del Consejo Directivo dela CGT.
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