Tiempo Argentino
28 de marzo de 2011
A diferencia de otras épocas en las que los funcionarios del Fondo hacían recomendaciones y dictaban los lineamientos de política económica, Nicolás Eyzaguirre se llamó a silencio y dijo que “ese no es asunto nuestro”.
Lejos parecen haber quedado los tiempos en que las decisiones económicas y sociales más significativas emanaban de las oficinas del Fondo Monetario Internacional (FMI), organismo que en la década de 1990 se convirtió en el epicentro donde se decidía el destino del país. Pero los tiempos cambian y de ello tomó nota el responsable del organismo para América Latina, Nicolás Eyzaguirre, quien evitó toda posibilidad de referirse a la controversia en torno a las diferencias de precios percibidas por consultoras privadas y por el oficialismo. “No es asunto nuestro”, expresó secamente el representante del Fondo, una respuesta difícil de concebir por parte del FMI hace apenas algunos años atrás.
El propio Eyzaguirre minimizó la discusión entre los analistas privados y el Indec. “Nosotros simplemente ponemos una nota a pie de página en nuestros informes diciendo que hay discrepancias”, explicó durante una conferencia de prensa que ofreció en la Asamblea anual del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) que concluyó ayer en Calgary, Canadá.
Consultado por el supuesto enfrentamiento entre el gobierno y las consultoras privadas que miden precios al consumidor, el funcionario dijo estar al margen de esa disputa.
“En lo que se refiere a cómo se manejan esas disputas, los procedimientos legales, no es nuestro problema”, afirmó.
En la última semana, la Secretaría de Comercio Interior, amparada en la Ley de Lealtad Comercial, multó a tres consultoras privadas por “ocultamiento, respuestas elusivas y falta de rigor científico” en la metodología empleada para medir el Índice de Precios al Consumidor (IPC).
El organismo que conduce Guillermo Moreno les requirió a unas 15 firmas privadas que muestren la metodología empleada para realizar sus estimaciones.
Flaquezas y falta de seriedad en las estadísticas fueron el común denominador entre las respuestas obtenidas.
El representante del Fondo se refirió también a la colaboración técnica que la entidad brinda a las autoridades argentinas, tendiente a la conformación de un índice de precios al consumidor nacional que tenga en cuenta las características de consumo de cada una de las provincias. Eyzaguirre aseguró que la cooperación evoluciona de manera positiva, y confirmó la visita de una delegación durante el mes de abril.
“Una nueva misión estará en Buenos Aires en abril, o sea que las cosas están evolucionando bastante en línea con lo esperado”, precisó Eyzaguirre, quien dijo confiar en poder entregar un informe final sobre el tema al gobierno argentino a finales de abril o comienzos de mayo.
La segunda visita de los técnicos estadísticos del Fondo –la primera fue en diciembre pasado– tendrá lugar del 4 al 11 de abril próximos, para continuar la colaboración con ese país en la confección de un nuevo índice. “Esperamos poder estar de acuerdo en los principales elementos de un índice nacional de inflación”, subrayó, para señalar que es “optimista” sobre la posibilidad de alcanzar un acuerdo.
Finalmente, el funcionario se refirió también al “artículo 4º” del Estatuto del Fondo, como se conoce a la disposición relativa a la revisión de la economía de los países. A ella se someten todos los países miembros del FMI anualmente, pero la Argentina dejó de ser supervisada desde 2006, cuando el gobierno del ex presidente Néstor Kirchner saldó en un pago de U$S 9500 millones su deuda con el organismo multilateral. “Para que el artículo 4º tenga valor tiene que haber un acuerdo”, señaló, y añadió que “no se puede hacer pan si uno no ha decidido qué harina usar”. En este sentido, el funcionario del Fondo remarcó la necesidad de llegar a un acuerdo sobre qué tipo de datos se van a utilizar antes de que rija el artículo 4º.
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