Un empate con olor a victoria kirchnerista

Tiempo Argentino
21 de marzo de 2011

El gobernador Mario Das Neves había prometido que si perdía la elección en Chubut abandonaría la política, pero no dijo qué haría si empataba. Porque la mínima diferencia que Martín Buzzi le sacó a Carlos Eliceche en un escrutinio irregular y cuando todavía faltan relevar 15 mesas, no permite alzarle la mano a ninguno de los dos postulantes como futuro gobernador de la provincia.
Pero si se tiene en cuenta que Buzzi le llevaba 30 puntos en las encuestas al “Ganso” Eliceche hace un par de meses, se advierte en cambio que el empate es un virtual triunfo kirchnerista. Si el dasnevismo ganara finalmente por una misérrima diferencia, el triunfo tendría de todos modos para ese sector peronista un sabor amargo.
Das Neves dijo antes de los comicios que esperaba tener “una noche inolvidable”. Y en verdad lo fue. Pero no por la victoria holgada que esperaba el precandidato a presidente del Peronismo Federal, sino porque el escrutinio lo mantuvo en vilo hasta la madrugada, cuando se animó a proclamar el triunfo de su candidato con una bronca inocultable. Todavía no se sabe en realidad quién sucederá a Das Neves en el gobierno de Chubut, pero está claro en cambio que la visita de Cristina Fernández hace un par de semanas a la ciudad de Cómodoro Rivadavia –la más populosa de la provincia patagónica– sirvió para que Eliceche igualara los tantos con el caballo del comisario.
En cambio, parece claro que Das Neves abandonará su candidatura presidencial, ya que los códigos políticos indican que no puede pretender gobernar la Nación quien no demuestra un liderazgo claro en el propio pago chico.
Si el triunfo kirchnerista en Catamarca la semana pasada tuvo un valor simbólico, el empate en Chubut posee aún un valor mayor, ya que las encuestas venían dando primero como amplio ganador a Buzzi, aunque luego los sondeos indicaron un final reñido.
En términos nacionales, ninguna de las dos elecciones permite al kirchnerismo un triunfalismo que sería suicida, ya que Catamarca concentra el 0,9% del padrón nacional y Chubut el 1%. Pero ambas elecciones parecen marcar una tendencia favorable con la mira puesta en octubre próximo. Ni Das Neves ni el catamarqueño Brizuela del Moral tienen una fuerte imagen negativa entre sus coprovincianos, pero la oposición al gobierno nacional les jugó seguramente en contra.
Por más que los medios más concentrados intenten convencer a los argentinos que viven en el peor de los mundos, nadie come vidrio. Y los votantes suelen agradecer en las urnas el mejoramiento de la calidad de vida. Eso es lo que viene ocurriendo de norte a sur.