domingo, 15 de mayo de 2011

La justicia busca a las monjas que tenían en custodia bebés apropiados

Tiempo Argentino
15 de mayo de 2011

Me tenían en una oficina, con varios bebés. Una monjita le ofreció un varón rubio pero Hernán le dijo que no, que la negrita era su hija”, contó la nieta recuperada Victoria Montenegro en la justicia. La escena, que relata el momento de su apropiación por parte del ex coronel Hernán Tetzlaff y María del Carmen Eduartes, ocurrió en mayo de 1976 en la Brigada Femenina de San Martín. Había llegado allí llevada por el mismo Tetzlaff luego de asesinar a sus padres, en un operativo y antes que la pareja se llevara a la bebé, una de las monjas les pidió que la criaran “cristiana, para que no sea subversiva como sus padres”.

Si bien ya había constancia de la participación de monjas en la maternidad clandestina que funcionó en el Hospital Militar de Campo de Mayo, este es el primer testimonio que menciona la presencia de un grupo de religiosas en la Brigada Femenina de San Martín. “Mi apropiadora sólo me dijo que pertenecían a una congregación de Morón y que la que estaba el día que me fueron a buscar era muy linda, pelirroja y con pecas”, relató Victoria en diálogo con Tiempo Argentino.

A partir de sus dichos, el municipio de Morón pidió la desgrabación de la declaración en el juicio por el Plan Sistemático de Robo de Bebés para intentar dar con la congregación de religiosas.

Según pudo conocer Victoria, en la comisaría de San Martín los niños sólo permanecían de cuatro a seis meses, y luego las monjas los llevaban a Casa Cuna. Además de su caso, esta metodología se habría repetido con otro nieto recuperado, Horacio Pietragalla Corti, que también forma parte de los 34 hechos investigados en el juicio oral por el Plan Sistemático de Robo de Bebés. Horacio fue llevado con sólo cinco meses por Tetztlaff a la Brigada Femenina de San Martín, luego de encabezar el operativo en el que asesinaron a sus padres, y poco tiempo después lo entregó a su empleada y vecina.

En la causa Plan Sistemático ya constan pruebas sobre la participación de monjas en casos de apropiación, en ese caso, en el Hospital Militar de Campo de Mayo, donde funcionó una maternidad clandestina y se cree que dieron a luz al menos una veintena de detenidas.

Varias de esas religiosas ya fueron identificadas y declararán como testigos en el juicio oral, cuando este llegue a la etapa de los delitos cometidos en esa jurisdicción, a partir de junio. Si bien por la zona de influencia de Campo de Mayo y la Brigada de San Martín podría tratarse de la misma congregación, fuentes de la causa indicaron que es poco probable y, en todo caso, difícil de conocer esa relación. En todo caso, la justicia espera despejar esa duda a partir de las declaraciones testimoniales.

La presencia de monjas en la maternidad clandestina de Campo de Mayo fue confirmada por muchos testigos e incluso por una de las religiosas, quien relató que, por orden de la madre superiora, fue a cuidar a tres chicos en el área de ginecología del Hospital Militar.

Una ex obstetra de ese hospital, Luisa Yolanda Arroche de Sala García, reconoció haber atendido a algunas mujeres vendadas y atadas y aseguró que allí vio a chicos de más de un año que eran cuidados por monjas. Otro médico del servicio de ginecología contó que “en dos oportunidades vio que el personal del Hospital, en el Servicio de Obstetricia, tenía niños de corta edad. La primera vez eran dos chiquitos de aproximadamente tres y cinco años que por su parecido físico daban idea de ser hermanitos, y la segunda vez, una de las monjas tenía con ella una criatura de aproximadamente dos años, que lloraba clamando por su madre. Que en ambas oportunidades el dicente preguntó qué hacían esos niños allí, obteniendo como respuesta la referencia a que habían entrado durante la noche pero que no tenían otros datos al respecto”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario