Tiempo Argentino
9 de mayo de 2011
La misión de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) que visitó la Argentina la semana pasada no pasó inadvertida en el resto de los países de la región, así como tampoco la solicitada publicada por Tiempo Argentino con las firmas de alrededor de un millar de periodistas, escritores, artistas, docentes e investigadores universitarios.
El Ciudadano, de Chile, país en el que los representantes de la cámara empresarial que reúne a los mayores grupos mediáticos del continente fueron recibidos por el presidente Sebastián Piñera, destacó que, a pesar de las consideraciones de la SIP, personalidades como Juan Gelman, Víctor Hugo Morales, Norbeto Gallasso, María Seoane y Vicente Muleiro, entre otros, aseguraron que “la difusión de ideas se encuentra amenazada por los monopolios informativos y la censura aplicada por medio privados”.
El País, de Uruguay, destacó a su vez que “en un encuentro informal, en el hotel Intercontinental, el presidente de la SIP, Gonzalo Marroquín, conversó con (Víctor Hugo) Morales y otros periodistas, acompañados por integrantes de Carta Abierta, que denunciaron obstáculos que impiden la plena vigencia de la libertad de expresión y amenazas de grupos monopólicos”.
En la misma línea, Notimex, de México, resaltó que Marroquín fue interrogado sobre las acciones que realizan las principales empresas de comunicación en la Argentina y lo recordaron “por la investigación que se lleva a cabo desde hace una década para determinar si los hijos herederos de la dueña de Clarín, Ernestina Herrera de Noble, son hijos de desaparecidos políticos”.
La agencia de noticias española, Efe, también destacó el cuestionamiento realizado por numerosos profesionales de distintas ramas a las conclusiones de la SIP a través de la solicitada publicada por Tiempo.
La cámara empresarial reconoció en la Argentina que sólo se preocupa por los supuestos avances contra la libertad de expresión ejercidos por Estados Nacionales, y que le presta poca atención a las acciones de empresas que ponen en peligro este derecho, revelando así que en su concepción, “libertad de prensa” equivale a “libertad de empresa”.
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